COMO GESTIONAR CONFLICTOS DE INTERES

Manuel Agraz Güereña

Un conflicto de interés ocurre cuando los intereses personales de un funcionario chocan con el interés público o privado que debería salvaguardar. Este conflicto se transforma en corrupción en el momento en que una decisión se toma buscando un beneficio propio o para familiares.

Para muchas empresas, los conflictos de interés representan un riesgo importante, por lo que suelen incluirlos en su código de ética o conducta. En los gobiernos, la situación es aún más delicada, ya que la impunidad puede favorecer la corrupción. En el ámbito empresarial, la consecuencia más severa para un empleado que incurre en un conflicto de interés suele ser el despido e incluso acciones legales. En el caso del sector público, los cargos están sujetos a la vigilancia de organismos de fiscalización y auditoría, que reportan estas conductas para que se sancionen con multas o prisión, según lo determine la autoridad.

Este tipo de conflictos puede generar serios problemas de confianza. Un empleado que incurre en ello expone a la empresa a posibles acciones legales y puede contribuir a un ambiente laboral tóxico que afecte la moral del equipo.

Ejemplos comunes de conflictos de interés incluyen:

Ser jefe de personal y ocultar un vínculo familiar con un candidato a contratar.
Ofrecer servicios externos a clientes o proveedores fuera del horario laboral.
Mantener una relación romántica con un compañer@ que pueda influir en decisiones laborales.
Trabajar de manera parcial para una empresa competidora.
No reportar irregularidades cometidas por un amigo dentro de la organización.
Realizar negocios propios usando los contactos del lugar donde se trabaja.
Aceptar regalos o favores de alguien que busca un trato preferencial que afecte a la empresa.

Toda organización debe trabajar en construir una cultura basada en la ética y la confianza, dejando muy claras las políticas, reglas y principios que definan qué se considera un conflicto de interés.

Entre las principales causas asociadas al individuo se encuentran:

Modelos sociales que fomentan la ausencia de valores.
Falta de educación o compromiso ético.
Excesivo poder discrecional otorgado a una persona.
Rasgos de personalidad antisocial o megalomanía.

Recomendaciones para gestionar adecuadamente los conflictos de interés:

Identificar: Empleados públicos o privados deben reconocer y reportar tanto los conflictos reales como los potenciales mediante declaraciones de intereses o directamente a su superior.
Informar por escrito: Es fundamental comunicar por escrito al superior inmediato cualquier situación que represente un conflicto.
Excusarse: No se debe participar en decisiones donde exista un conflicto de interés.
Seguir instrucciones: Acatar las indicaciones del superior sobre el procedimiento a seguir.
Evitar: Evitar y reportar activamente cualquier situación que pueda comprometer la objetividad en el desempeño de las responsabilidades.

Referencias bibliográficas: Conflicto de intereses: Que es, ejemplos y
como solucionarlo. Grupo atico34.

Manuel Agraz
Ingeniero Químico con Maestría en Dirección de Organizaciones
Actualmente Consultor Empresarial y Financiero
📩 manuelagrazpontifex@gmail.com